Binguero envia:
¿Cuántos años lleváis oyendo que el rock se muere? La gente que alegremente predica dicha defunción tendría que escuchar grupos como The Swingin' Neckbreakers, de esta forma se daría cuenta de que el rock es mucho más que una moda pasajera, mucho más que un simple estilo; es ya una forma clásica de expresión musical que ha trascendido los límites del tiempo y del espacio para quedarse con nosotros por los siglos de los siglos, amén.
The Swingin' Neckbreakers se forman hacia el año 1992, el grupo lo componen dos hermanos: Thomas y John Jorgensen, y en sus dos primeros discos estarán acompañados del guitarrista Don Snook, conocido como Shaggy. El grupo toma su nombre de una llave de lucha libre, y desde el principio tienen muy claro lo que quieren hacer; garage y r'n'r sin concesiones, directo a la mandíbula. Si hiciésemos un ranking de guapos en el mundo del garage de finales del siglo XX, The Swingin' Neckbreakers, como bien podréis comprobar, no figurarían en las diez primeras posiciones; pero si dejamos a un lado las frivolidades y hacemos un ranking de los grupos de garage y r'n'r más importantes de esa misma época, el trío de New Jersey ocuparía un lugar de honor (para quien os escribe estas líneas ocuparían el primero o el segundo lugar, ahí es nada...). The Swingin' Neckbreakers suponen el eslabón perfecto entre el revival garagero de los años 80's y la eclosión de un buen número de bandas norteamericanas que en los primeros 90's mostraban unas evidentes influencias 60's; en este grupo hay que situar bandas como The Devil Dogs, The Untamed Youth, The Woogles, Southern Culture On The Skids, etc.
El que tenéis aquí es su disco de debut, fechado en 1993 y de título "Live For Buzz". Es un disco magnífico y supone toda una declaración de intenciones por parte de la banda, que muestra cuál va a ser el camino por el que van a transitar en sus próximos discos. Junto a versiones de clásicos (y no tan clásicos) del garage, el r'n'r e incluso el soul de los años 60's, el grupo desgrana las composiciones de Tom Jorgensen, bajista y cerebro de la banda, quien se destapa como un gran compositor, no tenéis más que escuchar "Little Pink Medicine" o "She's Ready To Go Now" para comprobarlo. El grupo se diferencia de la mayoría de sus coetáneos por su sonido limpio y la buena producción de sus discos; mientras la mayoría de las bandas garageras de lo primeros 90's estaban en plena fiebre lo-fi, The Swingin' Neckbreakers despliegan todo su potencial con un perfecto sonido en el que podemos distinguir todos los instrumentos e incluso entender las letras, lo cual es de agradecer. The Swingin' Neckbreakers son muy buenos músicos sin perderse en improductivas demostraciones de técnica, lo que les hace ser fieles a su espíritu 60's, conocen la lección y son unos alumnos aventajados. Si queréis comprobarlo, aquí tenéis la oportunidad, yo en vuestro lugar no la dejaía escapar.
The Swingin' Neckbreakers- Live For Buzz (1993 USA garage)
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