milestone envia:"Compulsión, retención, pulsación, insociabilidad, nerviosidad, ansiedad ..." (J.M. París)
Un reloj de bolsillo se sumerge en un estático croissant, el diseño, surrealista y efectivo a partes iguales, fue realizado por Jordi Batiste para la portada de un disco que pasaría a la historia como "el del croissant".
Cuatro cortes regidos por la improvisación sobre los que planean capas de oscuridad que se adentran en el rock progresivo con elementos jazzísticos y una marcada psicodelia. Abre “I believe”, un medio tiempo instrumental en el que un monótono e hipnótico teclado marca el ritmo mientras la electricidad se desata en forma de crudos riffs de guitarra. El corte es obra de París, el día siguiente de la grabación del tema "Why?", le piden a este si tiene algún tema propio que pueda encajar con el repertorio, y París trae "I believe", les da unas pautas sobre la base a seguir y él va improvisando con la guitarra durante cuatro minutos.
La pieza central del disco, “Why?”, es improvisación pura y dura, uno de esos momentos de lucidez que tienen la suerte de quedar registrados para nuestro disfrute. Veinticuatro minutos divididos en dos cortes -debido a su larga duración no cabían en una cara del vinilo- que Luigi Cabanach describe con un parco “los auriculares me apretaban mucho, luego no sé…”. El corte presenta una estructura circular, se inicia y termina con la magnífica interpretación vocal de Batiste trayendo aires negros y experimentales, ¿qué ocurre entremedias? De todo. Las guitarras de efectos fuzz y wah wah y los teclados van generando capas que no se ciñen a una estructura concreta, subidas y bajadas se suceden hasta un desarrollo final más relajado en el que el hammond se cruza con guitarras, efectos contenidos y unos tratamientos a la batería sobresalientes. Se trata sin lugar a dudas del mejor corte del álbum, psicodelia setentera de altos vuelos y gran calidad. El pero, quizás, que con una producción más cuidada su impacto internacional sería otro.
Cierra el disco “Let me be born”, corte firmado por Batiste que después del exceso de “Why?” trae una placentera calma en forma de cálidos juegos vocales, una flauta dulce que juguetea con la electricidad y unos efectos que inundan el corte de psicodelia bien entendida.
La importancia de este disco, además del aspecto musical, radica en ser en cierto modo una obra pionera, que introdujo en nuestro país desarrollos vetados a los países anglosajones y ayudó a levantar el estatus del underground, alejándolo de concepciones marginales ampliamente extendidas para acercarlo a un público más amplio.
Fernando Fernández Rego
Why (Spain Rock 1971)
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